LETRA DEL HIMNO A DIANA
La diosa Diana era una de las principales divinidades en el pasado arucitano, diosa de la caza, la luna y la naturaleza, en la mitología romana, asociada con los animales salvajes y el bosque. En la antigua Roma era adorada en un festival celebrado, también en verano, concretamente el 11 de agosto, cuando se le dedicó un altar en el monte Aventino a mediados del siglo IV a. C.
Fue en el IV Festival de Diana en Aroche, cuando la sección musical del Grupo Municipal de Recreación Histórica Baebia Aruccitana, cantó por primera vez el Himno a Diana, que a su vez procede de un poema de Catulo, y cuya letra, en latín y castellano, es:
Dianae sumus in fide
puellae et pueri integri;
Dianam pueri integri
puellaeque canamus.
O Latonioa, Maximi
magna progenies Lovis
quam mater prope Deliam
deposivit olivam,
montium domina ut fores
silvarumque virentium
saltuumque reconditorum
amniumque sonantum;
tu Lucina dolentibus
Luno dicta puerperis,
tu potens Trivia et nothoes
dicta luminae Luna.
Tu cursu, dea, mentruo
metiens iter annuum,
rustica agricolae bonis
tecta frugibus exples.
Sis quocumque tibi placet
sancta nomine, Romulique,
antique ut solitaes, bona
sospites ope gentem.
CAII Valerii CATVLLI Munus ad fratis inferIas (Crm,CI)
Traducción:
Somos fieles a Diana,
muchachas y jóvenes castos.
A Diana, jóvenes castos
y muchachas, cantemos.
Oh, hija de Letona,
excelsa estirpe de Júpiter Máximo,
a quién tu madre aprió
cerca del olivo de Delos,
para que fueras señora de las montañas,
de los verdes bosques,
de los escondidos desfiladeros
y de los resonantes torrentes;
Tu eres invocada como Juno Lucina
por las dolientes parturientas,
tú eres invocada como poderosa Trivia
y como Luna por tu luz no propia.
Tu, diosa, en tu carrera mensual
midiendo el camino del año,
colmas tú de buenas cosechas
las rústicas moradas del labrador.
Sé venerada con cualquier nombre que te guste
y, tal como acostumbraste desde antiguo,
favorece con benéfica ayuda
a la raza de Rómulo.